Los medios de comunicación contribuyen regularmente a que se extienda entre la población un mito acerca de cómo los delirios y las alucinaciones de la psicosis afectan al comportamiento provocando actos violentos. Sin embargo, un nuevo estudio rechaza esta idea tan extendida asegurando que muy raras veces causan actos de este tipo. La investigación incluyó 305 incidentes violentos en los EE.UU., y la principal conclusión del estudio es que no se puede asegurar que la psicosis provoque habitualmente que las personas cometan delitos violentos.
El autor del estudio publicado en Clinical Psychological Science, la profesora Jennifer Skeem, afirma que sólo el 12% de los actos violentos fueron precedidos por la psicosis en un grupo considerado de alto riesgo. Son causas mucho más comunes la irá, el abuso de sustancias y el acceso a las armas de fuego. Los investigadores utilizaron datos de 1100 personas que fueron dados de alta de un centro psiquiátrico. Únicamente una pequeña minoría participaron en al menos dos incidentes violentos después de su liberación y de estos incidentes sólo en el 12% de los casos la psicosis fue la causa que desencadenó su conducta.
Menos del 5% de los homicidios relacionados con armas en Estados Unidos fueron perpetrados por una persona con algún tipo de enfermedad mental. De hecho, las personas con una enfermedad mental son más propensas a ser víctimas de delitos violentos que la media. Es importante recordar que los factores de riesgo más habituales para la violencia son el abuso de sustancias, el maltrato infantil y el contexto social en el que se vive y que estas causas son compartidas por personas con y sin enfermedades mental por lo que deberían ser la prioridad para mejorar la seguridad pública.