El trastorno bipolar afecta de forma diferente a las mujeres que a los hombres lo que provoca que las mujeres con trastorno bipolar tengan un riesgo tres veces mayor de ser mal diagnosticadas de esta enfermedad mental. Las combinaciones de los síntomas y las diferencias en la forma en que la enfermedad se presenta en hombres y mujeres provocan que los profesionales no siempre detecten que se sufre esta patología. A diferencia de la depresión unipolar que es más frecuente en mujeres, en el trastorno bipolar la prevalencia es la misma para ambos sexos aunque sí hay un mayor riesgo de trastorno bipolar tipo II en las mujeres.

Los hombres generalmente sufren mayores episodios maníacos que las mujeres, a las que les afecta de una forma más profunda la depresión. El trastorno bipolar se caracteriza por sufrir episodios maníacos o mixtos que duran al menos siete días, o por tener síntomas maníacos graves que requieren atención hospitalaria. Los episodios depresivos suelen durar al menos dos semanas.

Las investigaciones realizadas en los últimos años muestran que en un estudio de hombres y mujeres con trastorno bipolar I, las mujeres reportaron más síntomas de depresión, mientras que los hombres mostraron más síntomas maníacos. También hubo distinciones en los diagnósticos asociados, en los hombres se presentó con mayor frecuencia el abuso del alcohol  y en las mujeres los trastornos de la conducta alimentaria y los trastornos de ansiedad. Según los investigadores del estudio, estas diferencias en la comorbilidad médica deberían sugerir medidas preventivas de tratamiento específicas de género.